Gestionando la Complejidad: Cómo Liderar Empresas Relacionadas con Eficiencia y Estrategia

Queridos Hiper Evolucionados:

¿Te está costando despegar de este 2024? Es por la sensación de "pendiente" quizá, pero te cuento que esa sensación no se irá, debes expulsarla de tu cabeza. Mi que mi consejo es tomar nota de lo que te está molestando y dejar agendado el concepto clave del plan 2025, para que luego, vayas y disfrutes tus fiestas!

Toma nota del plan 2025, considerando lo que no se logró, no funcionó, siguió arrastrandose este 2024, a pesar de tus esfuerzos. En la vida, las cosas fluyen en direcciones que no esperamos. El trabajo, los equipos y las empresas, no son distintos. Date un respiro!

Para cualquier lider cerrar el año, con pendientes no es grato, pero hay una forma concreta de tomar el control de tu paz mental. Fija objetivos 2025 y concreta un plan de acción para aborar los desafíos más complejos, esos que intentaste abordar este año, pero de forma más superficial de lo que creías.

Se concreto, simple, haz una lista de supermercado, con lo que "no puede repetirse" este próximo año. Y libérate por algunos días al menos, de este desafío que quieres abordar.

Si estás administrando varias empresas relacionadas, estás con un desafío más complejo, y a ti, te dejo estas líneas como regalito de navidad.

Múltiempresas, multidolores de cabeza.

Hay un caso especial en la gestión de empresas, y se trata de liderar y gestionar empresas que están vinculadas por la administración, con un origen de propiedad común, aunque sus negocios puedan ser distintos. Como en un holding de servicios, de tecnología o de retail. En algunos casos, inclusive se trata de líneas completamente distintas como un negocio automotriz asociado a otro de negocio financiero y otro de ventas Online. Este caso, requiere una estrategia y equipo ajustados para lograr captar los beneficios y disminuir los dolores de cabeza en cada directorio.

Liderar un grupo de empresas relacionadas no es solo manejar operaciones; es articular un sistema donde cada parte contribuye al todo sin perder su identidad. En este escenario, el equipo ejecutivo se convierte en el motor de la estrategia, la coordinación y los resultados. Pero aquí está el desafío real: ¿cómo consolidar un equipo ejecutivo que no solo sea competente, sino también sinérgico y estratégico?

No basta con reunir a los mejores. Un equipo de alto nivel puede fallar si no está alineado en visión, prioridades y formas de trabajo. La falta de cohesión en los equipos ejecutivos es una de las razones principales por las que las organizaciones tropiezan cuando intentan manejar múltiples empresas en crecimiento. Y si te reconoces en este punto, es hora de actuar.

El Reto de Construir un Equipo Ejecutivo Funcional

Tu equipo ejecutivo está compuesto por líderes con experiencia y habilidades únicas, pero eso no garantiza que trabajen en la misma dirección. Aquí es donde surgen las tensiones:

• Falta de alineación en la visión estratégica: Cada miembro puede tener una interpretación distinta de las prioridades del grupo, lo que genera esfuerzos dispersos. Invertir tiempo en consolidar una mirada del grupo es clave.
• Conflictos entre áreas: Finanzas, operaciones, marketing o tecnología pueden empujar en direcciones opuestas si no hay claridad sobre los objetivos globales. Por eso, las jornadas de planificación, aún existen y existirán hasta nuevo aviso.
• Competencias individuales sin sinergia: Un equipo brillante puede quedarse atrapado en silos si no comparte un enfoque integrador. Por eso los estilos de liderazgo deben ser adecuados para que la suma sea mayor a cada una de las partes por separado.
• Resistencia a la centralización: Algunos líderes pueden percibir los esfuerzos de integración como una amenaza a su autonomía o relevancia. En este punto considera preguntar si estás tensionando mucho hacia la competitividad, pasando de sana a aniquiladora para la salud del grupo de empresas.

Como líder del grupo, sabes que la falta de cohesión en el equipo ejecutivo no solo frena el rendimiento, sino que también agota tiempo y recursos valiosos.

Reflexiones para Identificar Puntos de Mejora

Un equipo ejecutivo cohesionado no se construye por accidente; es el resultado de decisiones estratégicas y ajustes constantes. Aquí tienes algunas preguntas clave para reflexionar:

• ¿Tus líderes comparten una visión común del grupo? Si no están alineados desde la estrategia, la ejecución será descoordinada.
• ¿Las áreas están operando como socios o como competidores internos? Los conflictos en los niveles superiores generan barreras que afectan a toda la organización.
• ¿Tu equipo ejecutivo tiene claridad sobre sus roles y sus aportes al grupo? Sin una definición clara, las expectativas se diluyen y el impacto disminuye.
• ¿Están trabajando para maximizar resultados colectivos o están enfocados en proteger su territorio? La integración requiere que todos remen en la misma dirección, incluso si eso significa ceder protagonismo en ciertos momentos.

Estas reflexiones no son cómodas, pero son necesarias para dar el siguiente paso hacia una gestión más efectiva y alineada.

Un Caso Real: Reconstruyendo la Cohesión

En una empresa con la que trabajé, el equipo ejecutivo enfrentaba conflictos internos que estaban afectando directamente el desempeño del grupo. Cada área operaba como un feudo independiente, y las reuniones estratégicas terminaban siendo ejercicios de justificación, no de acción.

El primer paso fue redefinir la visión estratégica y asegurarnos de que cada líder entendiera cómo su área contribuía al éxito global. Esto implicó:

• Clarificar prioridades y métricas comunes: Establecimos objetivos compartidos que obligaban a cada área a colaborar para alcanzar metas del grupo. Creanme que este punto, que aparece como obvio para un ejecutivo, nunca es obvio para los equipos!
• Reestructurar roles y expectativas: Ajustamos responsabilidades para reducir solapamientos y alinearlas con las fortalezas de cada líder. Con profundidad, no desde el sentido común, sino mirando las cadenas de valor de cada negocio o centro de servicio compartido.
• Promover una cultura de colaboración: Implementamos reuniones regulares enfocadas en soluciones conjuntas, no en señalar problemas. Y aqui tu liderazgo es escencial!!

El resultado fue una transformación notable, progresiva, potente: un equipo que no solo operaba con más cohesión, sino que también lideraba con una visión clara y compartida.

El Rol del Líder en la Consolidación

Como líder, tu papel es ser el catalizador del cambio, y eso significa asumir la responsabilidad de consolidar un equipo ejecutivo verdaderamente cohesionado. Es fácil caer en la trampa de pensar que, al delegar esta tarea, el equipo encontrará por sí mismo el camino hacia la colaboración. Pero la realidad es que la construcción de un equipo integrado no ocurre por accidente; requiere intención, dirección y un esfuerzo constante de tu parte.

No se trata de microgestionar o controlar cada detalle, porque como líder estratégico sabes que eso sofoca la autonomía y el potencial de los miembros del equipo. Se trata, más bien, de establecer las condiciones adecuadas para que el sistema funcione: crear un marco claro donde las expectativas, los roles y los objetivos sean compartidos y comprendidos por todos. Es tu labor asegurarte de que cada miembro tenga el espacio y las herramientas para aportar lo mejor de sí mismo, pero también de que las piezas encajen para construir algo más grande que la suma de las partes.

Un consejo práctico: empieza por escuchar. Las tensiones en un equipo ejecutivo muchas veces nacen de supuestos no cuestionados o de agendas que no se alinean. Dedica tiempo a entender cómo percibe cada miembro su rol dentro del grupo, qué obstáculos enfrentan para colaborar y qué sienten que está faltando para que el equipo funcione mejor. Este ejercicio no solo te dará claridad sobre los puntos de mejora, sino que también enviará un mensaje poderoso: que el liderazgo no se impone desde la cima, sino que se construye en colaboración.

Tu capacidad para facilitar el diálogo, tomar decisiones firmes y mantener el rumbo cuando las diferencias emergen es lo que marcará la diferencia. Liderar en este nivel significa equilibrar el enfoque en los resultados con una atención aguda a las dinámicas humanas. Porque, aunque los objetivos estratégicos son esenciales, la verdadera fuerza de un equipo ejecutivo cohesionado radica en su capacidad para resolver problemas juntos, confiar en la experiencia del otro y avanzar como un bloque unificado.

El liderazgo en la consolidación no es fácil, pero tiene un efecto multiplicador. Cuando das prioridad a construir un equipo sólido, no solo mejoras su desempeño; también envías una señal a cada organización como un todo integrado, sobre lo que valoras: claridad, alineación y colaboración. Y esa cultura comienza contigo. ¿Estás listo para agendar este desafío de cara al 2025?

Recuerda que en Mudda Consulting, brindamos un servicio de acompañamiento estratégico en desarrollo organizacional, llamado 'Estrategia en Acción'. Este plan asegura que tengas una visión completa y controlada de cada aspecto clave de tu organización.

¡Que tengas unas lindas fiestas, querido Hiper Evolucionado!

Claudia.